El amor de Dios hacia su pueblo
Libro de Oseas
Oseas, cuyo nombre significa "Salvacion o Liberación", fue escogido por Dios para dar testimonio vivo de su mensaje ante su pueblo casándose con una mujer que le seria infiel.
Estos acontecimientos se desarrollaron entre los años 755 y 715 a.C. la amenaza de un desastre se acercaba inadvertidamente, aunque en esa época la gente gozaba de abundancia, prosperidad y paz, pero poco años más tarde comenzaron a ensoberbecerse provocando un colapso politico de la nación, Oseas describe algunos acontecimientos como: lideres corruptos, inestable vida familiar, extendida inmoralidad, odio de clases y pobrezas. Aunque la gente le rendia cultos a Jehová, la idolatría recibía más importancia cada día más, por ende, los sacerdotes no guiaban al pueblo por las sendas de justicia, pero en la obscuridad de aquellos días Oseas hizo surgir la esperanza de que el pueblo se volvería a Jehová.
El libro de Oseas trata de un pueblo que necesitaba oír el amor de Dios, Dios quería contarles cuan grande es su amor hacia su amada nación de Israel, y el camino por el cual el podia ofrecérselos, pero el pueblo pensó que podían comprar el amor (Oseas 8:9), para ellos el amor era una búsqueda para obtener placer (Oseas 2:5). Dios quería que Israel conociera a su amor verdadero "cuando Israel era muchacho, yo lo ame" (Oseas 11:1).
Dios necesitaba llevar este mensaje de amor a su pueblo, a un pueblo con oídos inclinado a escuchar, y si escuchaban no acostumbraban a obedecer, el plan de Dios era que la vida del profeta fuera su propio sermon. Se trataba de que Oseas se casaría con una mujer impura (mujer fornicaria) la amaría de verdad y tendría hijos con ella, iría tras de ella y la rescataría cuando se extraviara de sus caminos, en resume, Oseas debía mostrar, atreves de su amor por Gomer, la clase de amor que Dios sentía por su pueblo Israel.
Si comparamos esos pasajes en este presente como Iglesia, entonces la Iglesia de ahora sería como el Oseas de aquellos tiempo, Dios quería mostrar su amor hacia su pueblo por medio de Oseas, pero ahora Dios quiere mostrar su amor por medio de la Iglesia al mundo, porque si las personas que nos rodean no ven el amor de Dios en nosotros, no lo hallaran en ninguna parte, como Oseas, todos los creyentes son llamados a demostrar, a través de sus actitudes y acciones, el amor de Dios en Cristo a un mundo que busca a ciegas las señales de un amor único y autentico.
La doctrina de Pablo sobre Cristo como el esposo y la Iglesia como la esposa, tiene que ver con los votos y la ceremonia matrimonial por medio de la cual Dios establece una relación permanente con Israel. El libro de Oseas nos relata dos lecciones sobre el Espiritu Santo, la importancia de depender de la presencia del espíritu, porque cuando él estaba ausente Oseas experimentaba un gran vacío en la vida, en dos ocasiones Oseas usa la frase el espíritu de fornicación, eso traía consecuencias al estar llenos de un espíritu malvado, como Pablo menciona en los Efesios, Oseas relaciona un espíritu de esa clase con el vino, cuyos efluvios esclavizan a la humanidad. Este espíritu de fornicación también conduce a la gente por caminos falsos y hacia un falso culto y la aparta del conocimiento de Dios, en cambio el Espiritu Santo nos guía por caminos verdaderos y adoración verdadera.
El amor que Oseas sentía nos recuerda que la principal prueba del espíritu es el amor " Porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espiritu Santo que nos fue dado" (Rom 5:5), Dios le ordeno a Oseas que tomara una mujer fornicaria y que tenga hijos de fornicación, porque la tierra fornica apartándose de Jehová, el interés no radicaba en Oseas y su familia si no en Dios y su familia, Oseas presento a Dios como un esposo fiel y a Israel como una esposa infiel, pero el amor de Dios hacia su pueblo no le permitiría abandonarlo a pesar de la falta de conocimiento de Dios y el amor leal.
La esperanza para el futuro de Israel radicaba en su arrepentimiento y en el perdón y el amor de Dios, que hacía que El quisiera restaurar esa relación, como así mismo Dios quería restaurar a Israel por medio del arrepentimiento, Dios quería restaurar al mundo por medio de la sangre de Cristo, trayendo consigo un arrepentimiento verdadero hacia Dios, un amor que no se comparara con nada en este mundo "porque de tal manera amo Dios al mundo, que a dado a su hijo unigénito, para que todo aquel que en el cree, no se pierda, más tenga vida eterna" ( Jun 3:16).