Divino Creador
Yo Soy El Que Soy
En algún momento de nuestra vida, es posible que hayamos llegado a pensar o decir: ¿Quién creó el universo, el mundo y todo lo que existe, incluyendo al hombre?
Para obtener ese conocimiento y encontrar las respuestas a nuestras grandes preguntas, debemos ir más allá de lo que el ser humano o el hombre no puede lograr por sí mismo.
El mismo divino creador, que es llamado Dios, nos ha dejado un libro llamado la Biblia, a través del cual nos da el relato de su existencia y de su conocimiento. También nos enseña acerca de toda la creación y nos revela los secretos de su palabra, el camino a seguir, la verdad y la vida. Es un camino que él ha dejado a través de esa palabra para que los hombres conozcan quién es Dios y su voluntad. Mediante ella, conoceremos a Dios tal como él es.
Conoceremos su propósito en nosotros, su amor, sus planes, su poderío, soberanía, verdad, juicio, fidelidad, rectitud, piedad, misericordia, autoridad y aquel cuyo nombre está por encima de cualquier otro, se mostrará a través de su palabra para impactar al mundo, trayendo una salvación única al hombre para que pueda vivir nuevamente con Él en su reino. Sí, Él es el Rey de reyes y Señor de señores, al cual le debemos obediencia total sobre todas las cosas y solamente a él, porque está por encima de todos y, sobre todo, en todas las cosas, ya que es el único Dios existente. A través de su palabra, obtendremos el conocimiento de la verdad y la vida.
Y para poder tener ese conocimiento de la verdad y la vida, necesitamos al mejor guía, aquel que lo sabe todo y conoce lo más profundo de Dios. Él nos dará la revelación, el entendimiento, el conocimiento y la sabiduría para poder comprender lo que Dios quiere hablarnos a través de su palabra y mostrarnos las obras y maravillas de su poder. Más adelante, conoceremos a nuestro guía que nos enseñará el camino recto y agradable a Dios, dándonos a conocer sus promesas, porque somos su creacion y nos mostrará el pasado, el presente y el futuro en un solo camino. Porque para Dios, un día es como mil años, y mil años para Dios es como un día.
Pero para que Dios mostrara su poder, tuvo que haber un principio. Cuando hablamos de un inicio u origen, entendemos que fuimos creados por un poder divino cuya fuerza es incomparable e infinita. Esto nos enseña que tiene dominio sobre todas las cosas que existen en su creación.
Por ello, su conocimiento, inteligencia, sabiduría, palabra, soberanía y poder, cuyo pensamiento el hombre no puede entender ni comprender, son tan grandes sus obras y el significado de todas las cosas que el hombre no puede comprenderlas por si solo, una divinidad que lo sabe todo, lo conoce todo, lo entiende todo, lo crea todo, lo consume todo. No hay nada oculto que sus ojos no puedan ver. Nos indica que él conoce cada detalle, cada cosa, cada rincón e incluso lo más profundo de nuestros corazones, porque el corazón y la mente del hombre son escudriñados y disciernidos por él, además de hacer todo lo que nosotros no podemos hacer; su poder no tiene límites para realizar lo imposible.
Nadie ha visto jamás a Dios, pero podemos entender que Dios es espíritu. Esto significa que Dios es omnipotente, lo puede todo; omnisciente, lo sabe todo, y omnipresente, está en todas partes. Como espíritu, es inmortal, no tiene principio ni fin, y tiene plena conciencia de sí mismo. Por ello, dice 'yo soy', es la esencia del amor y ama. También es un juez recto, totalmente justo y fiel.
El ser humano por sí mismo no tiene las palabras para describir la grandeza del Divino Creador, pero Él mismo las dejó implantadas en su palabra para que podamos entender y conocer quién es Dios, porque su palabra da testimonio de Él.